Siento que debo presentarme, pero eso me aburre.
¿De que sirve? Si pocas veces sabemos quienes somos y solemos mentir para captar la atención o quedar bien,mm, igual este choro es una presentación, que sé yo…
Me siento desesperada, vivo en un mundo prediseñado, las cosas se deben hacer en cierto orden, primero come y luego juega, primero estudia luego te dedicas a eso, primero cásate luego ten hijos.
Hasta en el arte, donde se supone que hay más libertad, todo debe seguir cierta forma, modo de preparación; no seguiste la métrica, te falló el encuadre bla bla bla, sí, sí, debemos aprender de lo que ya fue, primero conocer las reglas para romperlas, tantas frases, que por hoy no me importan ni me bastan.
¿Y si quiero hacer un espacio sin objetivo alguno?, ¿si me quiero quejar sin levantarme a intentar cambiar el mundo?, si no quiero ser nada importante en la vida ¿qué? No por eso será el fin del mundo.
¿A que se le teme?
O la pregunta debería ser ¿a que le temo?...
No sé, ya basta de divagar por hoy.